El grito de la mariposa

El grito de la mariposa
Grafito y tinta sobre papel

viernes, 2 de septiembre de 2016

A mi padre Miguel Ramírez Blazquez. Te amaré hasta que se apágue la ultima estrella...

De la salvaje grieta del corazon
muertos y fantasmas se desploman
de la grieta te llamo,desde la grieta te adoro
y sigo sangrando...
Sabias que tus dias habian acabado
los huesos se rindieron al fin
ceso de fallar la maquina de la locura...
Y sin embargo una vez fuiste joven
tanto como el agua recien creada
recuerdo la amistad y el amor tácito
el que va mas alla de las palabras y los hechos
el amor siempre es invisible
ese infatigable amor es la historia de lo invisible
¡¡de lo invisible que tu ya ves!!
debe ser vastisimo ese universo de diamantes que ahora habitas
al amparo vitreo del cielo angelical
yo aquí en el destierro solo puedo ponerme a recordar
recuerdo los desayunos en Orion
los sabados de clorofila y oro
la diversion y las suertes
Nada rompe mas el corazon que la muerte
hemos nacido en la tristeza absoluta
hemos nacido en la realidad!...





viernes, 18 de marzo de 2016

Triunfo
Cuando triunfe
no habrá más Nueva York
habrá tal vez Shanghái…o las ruinas de Shanghái
y ya no importara el arte
o tal vez mataran por el
cuando sea foto…recuerdo
bosque de cera, chorreado y triste
pero ¡pronto!, llega ya
el día que ya no estarán los perros
ni los gatos ni sus noches
ni los niños forasteros
ni sus sueños… ¡ni la fama!
pero estarán las legiones

¡Esas estarán!
Rojo
Rojo es el desalojo de la noche
y la cabeza tierna de los guillotinados
los latidos del miedo
el perfume de la historia
y las fieras del sueño rojas son
rojo es el goteo monótono de la madrugada
rojas las maquinas creando al mundo
el llanto del diablo, el chillar del cerdo
y la estrella despuntada que me agobia
y la paciencia de la crisálida
rojo el cadáver de la amapola
rojos los atardeceres lumbrosos y humeantes
el néctar de las venas y las arterias
la fiebre rubia y las llamas trepidantes
roja la fila hacia el revolver
rojo es el caer del mundo
y el primer sorbo de sangre…que siempre coce la garganta
pero es profunda noche, abismo azulado

el ala negra del desengaño.
Topografía de la pesadilla.
Nos tocó habitar la sombra
Transitar la obscura carretera del destierro lunar
Visitar el valle de los amores muertos
Recordar con nostalgia la tragedia
¡Lloveremos lo que tengamos que llover!
Labios que asesinan la tarde invocando la noche
Esa noche inmensa que fue mi única patria
Los números mágicos me siguen
A veces sigilosos…A veces violentos

Siempre indescifrables.
Tiempo circular.
Estos medios días jadeantes, enloquecidos, desmemoriados
Estos cielos intrascendentes de las tres de la tarde
Sin sangre para el graderío…
Hay en este triste parpadeo de abeja dormida
Los suspiros del desastre en mis ojos de aguacero
En los calvarios de mi frente
Dios, tu nube sigue dormida
Medievales pasan las horas
Tarda tanto en despedirse la tarde
Y cuando llega la noche se pasea oronda y muerta
Aunque sigue siendo frágil

Ante los embates dorados del alba.
Vagancias.
¡Vagar!...Pasatiempo inmenso y silencioso
En el mar de cemento acanalado
De repente me parecieron extraños los arboles
Y las palmeras sembradas en el concreto
La vida no es más que ecos de otras vidas
Repeticiones incesantes, riñones quemados
He aquí los días viviéndolos en las grietas
El corazón sueña un sueño de platino
Sigo vagando, ignorado por los relojes
Oigo la convulsión naranja del cigarro que muere
Huelo las flores que se riegan con sangre

Sigo caminando…Hacia las playas ardientes y doradas en el centro del mundo.
Vida golfa.
En esta vida que vivo, el sol sale de la cloaca
de las letrinas del diablo
al amparo del pavor
y de mares inconclusos
flota el cerdo sacrificado
la orgia de moscas sobre la golondrina
el foso aúlla el festín de la plaga
Soy como un perro clamando sombra y agua
gato sin noche.
las ratas bajo la lluvia
sus caras de tristeza
sus fauces enternecidas
pidiendo socorro…recordando el fuego
y se ausenta la cordura
y se ausentan las cordilleras

y la vida.
Prohibición.
Sembrado en monte y fango
me lo prohibieron todo
envolverme en pólvora y carcajada de hiena
bañarme en absenta y rugir…y arder
velar el sueño de los abedules
prohibido estar de estruendo embrujado
asesinar horizontes
jugar el juego de la garra y la piel
vivir a la intemperie del arte
cantar la canción de la peste
acudir al entierro del clavel
en los jardines del diablo.
prohibido murmurar el verano
en idiomas penumbrosos
despertar los secretos
preñar cavernas de aullidos y cantos
ni mendingar noches, ni fornicar con ellas
prohibido incluso la siembra del oro… en los fondos tenebrosos
¡pero Yo lo transgredí todo!

y soñé como si hubiera tiempo para soñar.

jueves, 17 de marzo de 2016

Presa fácil.
Los corazones sin sueños son susceptibles a los sigilos del diablo
Platíca de dinastías almenadas
Te habla del suicidio, pretexto para viajar
Más allá de las sienes reventadas
Hay ángeles sangrando leche
Y animales de cabelleras pardas
Y conocerás el agua maullante

Madre del rey tétrico y purpurino.
Noche Banal
Como extraño aquellas noches vanas
cuando no existía el fin del mundo
pero como han peregrinado los años
sigue aquí la vieja patina de la tragedia
cuando las flores entren también en batalla
ojos pálidos en el motel del tiempo…miraran
A todas las arañas del reino

Zarpando sollozantes.
Miseria y Torrente.
La miseria siempre me levanta a medianoche
y  aunque mi oficio siempre ha sido la niebla
el pellejo se estruja y se acobarda
y vago…Donde vagábamos
olvidadizo como espejo
pero terco como sombra.
no es el mío un labio avergonzado
ni mi ojo inextinguible
acá amanece un crepúsculo engañoso
los días se evaporan…imperceptiblemente

en el torrente ansioso de la última edad.
Metalurgia.
Estalla la noche metalúrgica
estruendoso aleteo de fuego
lenguas nuevas, nuevas leguas
las jaulas rotas, las tumbas vacías
y los ojos estragados…
La esperanza crea cosas y mundos
costumbres siniestras
excrementos luminosos
huéspedes…
Intruso celeste, astro forastero

¿Cuál es el nombre de tu corazón?

lunes, 14 de marzo de 2016



Matilda.
Creciste en dos meses, pequeña fiera
lo que yo en una vida
tierno depredador mío
merodeador nocturno…Vida mía
me dejaste cinco guerras contra el intento mortal
mañana te entregan, me dijeron…
traducida en un polvito negro
en una pequeña cajita blanca

con tu nombre cantado.
Luna nueva (Rosh Jodesh aviv).
Sigues ausente luna nueva carmesí
Aquí abajo la carne esta desolada
Con tantos dardos, tan trémula
Incubando la dentellada
Navegan los colmillos bajo la piel
Un veneno nuevo para cada día
Una nueva herida
Acá viajan juntos el oro y la sarna
Acá se baila con la cobra

Yo solo puedo seguir diciendo el borde de tu nombre.
Los obscurecidos.
Hay en nosotros los obscurecidos un dios congelado
lo despierta el abismo profundo
cuando se yergue la niebla
pasar las horas mirando
las llamas lentas desmantelando el oro
y la piel de los reyes caídos, llameantes…humeantes
ataviados de desprecio

en el umbral del tornado.
Los hijos rutilantes.
Que me sueñe un Dios loco, no me importa
ni que naufrague mi mente en el infierno
soy de raza alucinada
de tez desbordada y opresora
de corazón esquirlado
pero de pronto… se esfuman las Ciénegas
se evapora lo humano
aparece el vértice asombroso del relámpago

aparecen los hijos rutilantes.
En el borde.
Vivo En el borde
a punto de convertirme en altar y vino
¿Cuantas lunas necesito para hacer mas habitables mis noches?
los abismos ebrios silban
el rojo y obscuro secreto de tu alfilerado corazón
llueven otra vez suspiros y llanto de mil nardos
huele a oro y serafín
sigo meditando licores y sueños
y muchedumbre de venenos
la memoria inconsolable, la testa rapada
los ojos rapaces
y mis maneras de sol glacial

de tigre bañado de sonámbulo mar.
Epidemia.
Hay una epidemia de noche
Una primavera ardiente con sus flores silenciosas y plateadas
Solo escucho el trinar salvaje del mirlo
Quiero el gozo que aplaca las crisálidas y los suspiros
El gozo antiguo que aplaca la carne
Las plegarias esperan pacientes su nacimiento

Esta tarde es una calca de algún planeta desorbitado.
Entierro.
Te enterrare ahogada en miel
En la vastísima columna
Rindiendo tributo a los ruiseñores de la escarlatina
Más allá del zumo perfumado de tu cuerpo
Escuchas cuentos y cantos de ancianas rocas
No le creo a tu silencio, a tu música mínima

A tu transparente mascara…Ni a tu desprecio.
Enigma de otoño
Pienso en los sumergidos en polvo
en el lugar de los huesos profundos
en la madera cercenada
¡Creo anhelan el techo del mundo!
a veces ríen y susurran
irreales multitudes tísicas
en este enigma de otoño

lunas ya galopadas.
El trueno perpetuo.
El aliento ardiente de la belleza
bestia relumbrante que calcinas diamantes
en este mar de plomo
mezcla de maravilla y fermento
presencia equina en la obscuridad
que guarda los tesoros funestos

en el trueno perpetuo.
El país de Marzo.
Camino estos días hechiceros
Temeroso del abismo radiante
No sé qué hare cuando acaben los secretos
Y no haya rumores congregados ante el cordero
¿Qué hará este corazón menesteroso?

En el país de Marzo.
El mal.
El mal ocurre en el tiempo y en la tierra
En las plantaciones de fuego
Ocurre cuando la sangre viaja rápida y lejanamente
En los pecados letales de un pueblo sin ira
El mal ocurre en el secreto

Y en los miles de aquelarres a los que asistieron las monjas estrechas.
El hada.
En este obscuro viaje del cuerpo
Estuve atado a las obsesiones del búho
Y el hada de la poesía bajaba cuando estaba herido
(No sirven la flagelación ni sus variantes)
Debía de ser una herida limpia y certera dada por la vida.
Hubo veces que el hada bajo mucho
La vi cientos, acaso miles de veces
Con su granada de fragmentación en la mano
Blandiendo rítmicamente su navaja dentada
Pidiéndome bellas palabras de rubí

Espesas palabras de sangre.

domingo, 13 de marzo de 2016

Dormir entre misterios.
¿Que puede alegrar mas que dormir entre misterios?
amanecer convulso entre los leopardos
besar leprosos con mascaras de oro
incendiarte el cabello por amor o aburrimiento
heroico en la mustia madrugada
ir a la mina a ver su apetito de hombres

a conseguirte la obscuridad.

Dopelganger.
¿Cómo vivir con el que habita en el espejo?
Dopelganger rabioso, hombre hembra del desierto del mar
Rostro esculpido en ebriedad
Huracán humillado frente a mi frente
Muchacho anciano, hirsuto y roto cabello de hiena
Me replicas y me imagino yaciente, tras la lapida
Hermoso y baldío…Abandonado…
Se confundirán y me creerán un dios
Uno falso…Como tantos otros
Muerto como los primeros dioses
En sarcófagos de oro

Entre raíces de estrellas.

lunes, 7 de marzo de 2016

Doce tigres.
He metido doce tigres
en el descampado de mi vida
me matan de amor a zarpazos
saltamos ebrios e ingrávidos
de muro en muro
de espejo en espejo
como han alumbrado mi vida
estos gatos desdeñados
en jardines desmemoriados

en el minúsculo latido.
Dicha.
Dichoso tu que no percibes el lento perfume de la descomposición
Que no asistes a los funerales de los pájaros y los roedores
Que no escuchas el bramido estelar
Ni contemplas el teatro de la tragedia inanimada
Ni escuchas el lúgubre canto del diazepan
Dichoso tú, pagano, que menguas dichoso

Porque te arrasara la estrella.
Detrás de los parpados.
De todo lo que hay detrás de los parpados
me quedo con el negro misterio del silencio
con los pilares de fuego, en el reino pálido
con la sangre goteando sobre la nieve
amordazada luz de rubí
me quedo con la lujuria de la llama
con los peces ancianos y tiernos
y el sonido del crepúsculo
y la epidemia de  secretos

geografía de joya antigua.
Deseo.
Quisiera ser todas las hogueras
preñar al cielo de purpura encanto
dejar al mar inmóvil y embrujado
sigo soberano sobre Saturno
sobre las piedras ancianas y aposentadas
sobre las azucenas al fondo del abismo

sobre la plaga.
Desapego.
Ya no está la prisa del reventar
ni el lúgubre ejercicio de conocer las almas
oigo rugir al mundo…No me inmuto
yazco, menguo
me lleno el ojo de corrupción
propago el hambre, el origen
el encanto del obscuro granate.
la sed en los tugurios solo se apaga
haciéndome unos pantalones con la piel del diablo.

Cuando me desahucien
Nada de titilantes lamentos
Has de parir para mí, estrellas
Deja que me anegue de poesía
De farragosa arena inhabitada
De nefastas danzas purpurinas
Sumérgeme en los licores del imperio
Donde duermen estruendosos los sentidos
Tu esmérate en agobiarme de otoños
Y al final deja que mis gatos me desollen
Para vivir en el tiempo que duran sus maullidos

Y sonríe…Tu sabes que a mí la muerte me duro toda una vida.
De la noche.
De la noche no se vuelve
es demasiado seductora…demasiado puta
te llena de mimos diablos
de esplendidas obsesiones
de la noche no se escapa
ella colisiona el sueño y las rosas
los riscos vertiginosos son sus moradas
el jugo caliente de tu sangre
se rompe el rigor del palacio sin relojes
inauguran  nuevos horrores, las invenciones de los malquimistas
es opulenta la noche y su secreto rubor

y cantan…cantan los garfios.
Cultivando al reptil.
Termino el milenio del aullido
Llega el eón del reposo
Congelada ya la era del reptil
Con la reluciente savia del espanto
Huyen las colinas porque saben que regresa el fuego
Todavía hoy las llamas aún son tiernas

Es la inocente voz del trueno.
Cuando tomes.
Cuando tomes, toma con el estómago vacío
desolado…
con el estómago apenas amanecido
veras (tal vez) este éxodo de carne

más o menos perfumada
más o menos profunda
alguna que otra magia pobre
iris reventado, tesoro de azogue
veras un arenque dorado que agoniza entre tus dedos
y si tienes suerte veras pasar la manada obscura y opaca…
¡Pero tu juega!...Juega con el viaje tibio de la sangre
al otro lado del sueño
juega con la fiebre, juega a perdonar

como una fauce compasiva.

lunes, 15 de febrero de 2016

Ayer.

Ayer apenas…Oraba
Pero ayer fue hace ya mucho tiempo
El verano es historia antigua
¿Tu amor existió?
¿Mi nacimiento inmemorial?
Incluso las profecías envejecieron
Apenas anoche era copa

Y hoy diáfana espina.

Arquitectura de la orgia.

Yo que camino en esta espera, en esta espera me pudro
Yonqui forastero, Yo que fui enjambre de rugidos
Lista y reluciente bala en el revolver
Cabello de oro negro y majestuosas lagrimas
Loco en este final del tiempo
Inenarrable vagabundia, rijoso guardafuegos
De pronto me vi ahí, como ave absorta
Esperando el incendio
Observando la maqueta que es el mundo

La arquitectura de la orgia.
Alumbramiento.

Se viene al mundo desgarrando la carne
Se viene ya con sangre en el cráneo
Y averiado el corazón conocimos primero la noche
El sueño astillado en el diminuto bosque
De mi mente triste y radiante
¿Por qué entonces me pides paciencia y mesura?
Cuando sabes que todo lo que soy es vértigo y nausea
Quisiera amarlos a todos, para después traicionarlos…Dulce, fugaz, placenteramente

Amorosisimamente.
Al sur.
La nueva raza es la misma que la raza antigua
Han bajado como estrellas a beber del corazón del mar
¡Todo ha sido colmado!
Solo espero que sus riquezas les pesen mucho a la hora de huir del fuego
Los afortunados ardiendo, los ganadores perdiendo
Perdiendo lo irrecuperable…

Cayendo muy, muy al sur…